El momento ideal para elegir médico de cabecera es cuando estamos sanos. Cuando estamos enfermos no tenemos tiempo ni energía para hacer una búsqueda satisfactoria.
A continuación algunas recomendaciones para seleccionar un buen médico alternativo:
Así tendrá oportunidad de que lo conozcan y de conocer al profesional.
Escoja a un médico general o con orientación holística como médico de cabecera.
Las estadísticas indican que del 70 al 80 por 100 de los problemas de salud pueden ser resueltos por el médico de familia. La idea es evitar fragmentar la atención médica. Es frecuente la consulta directa a especialistas -urólogos, cardiólogos, traumatólogos, etcétera.- y los resultados suelen ser insatisfactorios. La derivación -si es necesaria-debería hacerla nuestro médico de cabecera.
Solicite nombres.
Haga una lista con los nombres de los profesionales clínicos y de ser posible con orientación holística que posean consultorio cerca de donde usted vive. Vecinos, amigos y el farmacéutico de su confianza pueden aportarle recomendaciones.
Evalúe la conducta del médico
Descarte a aquellos profesionales que atienden en cadena, pasando de un paciente a otro, de una cubículo a otro cada 10 minutos. No son recomendables los médicos que se apresuran a recetar antibióticos, calmantes o medicinas fuertes. Dude de aquéllos que tienen la rutina de ordenar análisis costosos o peligrosos a todos sus pacientes.
Busque a alguien que insista en un enfoque holístico y que haga medicina preventiva.
Un buen médico se interesará por su dieta, su trabajo, sus hábitos de ejercicio, su dependencia del tabaco, sus pasatiempos, etcétera, a partir de lo cual hará recomendaciones adecuadas para mantenerlo alejado de afecciones graves.
Un médico holístico se interesará por sus pensamientos, sentimientos y creencias: cuerpo, mente y espíritu son un todo inseparable. Dará mucha importancia a su bienestar mental y espiritual como generador de la salud física.
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