Desde hace mucho tiempo, se ha podido observar que la rosa mosqueta es una planta importante tanto en el mundo de la medicina naturista como en la belleza.
Sin embargo, cuáles son, exactamente, sus propiedades que benefician tanto al organisno.
Es multivitamínico El aceite de rosa mosqueta es rico en vitamina C. Su cantidad es 50 veces mayor a la que se encuentra en el limón, y 8 veces más a la que aporta el kiwi. Por otro lado, no es menor su contenido en vitaminas A y E, riboflavinas, flavonoides, etcétera.
Tonifica y regenera la piel La crema de rosa mosqueta tiene efecto tonificante. Se puede aplicar realizando un suave masaje con las yemas de los dedos. El aceite de rosa mosqueta activa la regeneración de las membranas celulares y es formador de la cadena Omega-6 y Omega-3: sustancias que intervienen en la producción de la melanina y activan el colágeno.
Mejora las micciones Posee propiedades diuréticas, por lo que contribuye a incrementar la cantidad de orina eliminada.
Antienvejecimiento del organismo La rosa mosqueta previene el envejecimiento por su alto contenido en vitamina C. Gracias a esta sustancia, interviene en el tratamiento de manchas, redistribuye la pigmentación y uniformiza la coloración de la piel. Además, mejora el crecimiento dérmico.
Aumenta las defensas Los ácidos grasos esenciales presentes en la rosa mosqueta, favorecen la formación de las prostaglandinas (derivados de ácidos grasos), que desempeñan un papel importante en el sistema inmunológíco.
Tomar en cuenta Como el aceite de rosa mosqueta contiene abundante cantidad de lípidos (grasas), su uso no es recomendable en pieles con acné o muy grasas.
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