Un baño caliente es la mejor manera de relajarse para que acuda el sueño, o bien, de relajar el cuerpo para seguir adelante. Puede optar por preparar sus propios productos (infusiones o bolsitas de hierbas) con antelación, con la ventaja de que siempre estarán a punto cuando los necesite.
Las hierbas con mayor efecto sedante son valeriana, melisa, mejorana, lavanda, lúpulo y pasionaria.
Si se decide por los aceites esenciales, tenga en cuenta que los más relajantes son lavanda, melisa, sándalo y bergamota.
Vinagre de baño con valeriana y manzanilla
12 cucharadas de manzanilla.
4cucharadas de raíz seca de valeriana.
1/4 de litro de vinagre de vino blanco hirviendo.
Ponga las flores y la raíz en un frasco y vierta en él el vinagre hirviendo. Ciérrelo bien y agítelo varias veces al día A las dos semanas, cuele su contenido y enváselo. Use una taza de este preparado para cada baño.
Baño de sasafrás
3 cucharadas de corteza de sasafrás.
3 cucharadas de raíz de lampazo mayor.
2 cucharadas de agrimonia.
2 cucharadas de hojas de consuelda mayor.
2 cucharadas de hojas de salvia.
Este baño está sobretodo indicado para aliviar los músculos doloridos. Prepare una infusión bien fuerte con todos los ingredientes o bien póngalos directamente en el baño dentro de una bolsa de gasa.
Baño de manzanilla
Agregue una infusión fría de manzanilla o 2 bolsas de manzanilla al baño templado. Este baño favorece la relajación de los músculos y perfuma delicadamente la piel.
Baño de salvia y lavanda
1 cucharadita de hojas secas de salvia.
1 cucharadita de flores de lavanda.
1 cucharadita de hojas de laurel trituradas.
naga una infusión concentrada con una taza de agua hiriendo. Cuele y añada el líquido al baño templado.
Baño de abrótano
3 cucharadas de hojas de abrótano picadas.
1,5 litros de agua hirviendo.
Tiene efectos calmantes y resulta especialmente indicado si debe continuar la actividad después del baño (para salir por la noche, por ejemplo).
Ponga las hojas en un recipiente resistente al calor y vierta sobre ellas el agua hirviendo. Tápelo. Al cabo de una hora, cuele el líquido y enváselos. Vierta en el agua medio litro de esta infusión.
Vinagre de baño con laurel
8 cucharadas de hojas de laurel picadas.
1/2 litro de agua hirviendo.
1/2 litro de vinagre de sidra.
Disipa las dolencias y preocupaciones del día más fatigoso. Ponga las hojas de laurel en un frasco y vierta sobre ellas el agua hirviendo. Tape y deje que repose media hora. Añada el vinagre y déjelo reposar una hora más. Cuélelo y enváselo. Ponga medio litro de este preparado en cada baño.
Con la aplicación de estas recetas, usted podrá decir seguramente adiós al estrés.
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