Hay que partir de la base que aunque la Navidad sea motivo de celebración, no hay por qué celebrarla dándose cada día un banquete.
Para que un diabético la disfrute con salud, la mejor opción es no realizar comidas copiosas, "se puede hacer un excepción pero no de forma continua. El consejo es pedir siempre la mitad de la ración que se vayan a servir, sea el plato que sea".
Sin embargo, si no se puedes resistir a uno de los manjares que te han puesto sobre la mesa, compénsalo con alguna de estas opciones:
- Si el entrante es muy graso, de segundo elige un pescado a la plancha o al horno, y de postre fruta fresca.
- Cuando es el segundo plato el contundente, empieza la comida con una crema ligera o una ensalada y termina con un fruta que facilite la digestión como la pina o la papaya. El punto final puede ser una infusión digestiva.
- En el caso de que lo que te "pierda" sea el postre, el primer y segundo plato deberán ser ligeros, y acompañados de una ensalada o una guarnición de verduras.
Y al día siguiente no te olvides de:
- Comenzar la jornada realizando ejercicio físico.
- Extremar el control dietético del día.
- A no ser que se encuentre físicamente muy mal, no se recomienda realizar un control de glucosa de forma inmediata.
Los alimentos amigos y enemigos
Es importante, también, que los diabéticos pueden reconocer los alimentos amigos y enemigos en estas fiestas y en todas las distintas actividades que realicen.
Los alimentos amigos
- Los frutos secos y las frutas desecadas son también muy típicos en estas fechas, energéticos y más saludables que los dulces navideños. Aunque también deben consumirse con moderación, la grasa que aportan es buena.
- El ejercicio físico ayuda a perder peso y a controlar los niveles de glucosa. Intenta incluirlo en el día a día dentro de tus hábitos cotidianos, de esta forma te costará menos esfuerzo.
- Repartir las ingesta de alimentos a lo largo del día. Se recomienda servirse raciones más pequeñas pero realizar cuatro o cinco comidas al día.
- Los edulcorantes más recomendables, siempre que se utilicen en las cantidades diarias recomendadas.
- Siempre debe respetarse el tratamiento médico, sea o no sea día festivo. La medicación es uno de los pilares básicos para tratar la enfermedad y llevar una vida normal.
Los alimentos enemigos
- Casi todas las bebidas alcohólicas son azucaradas y con alto contenido en hidratos de carbono. Para brindar y como excepción, se puede tomar un vaso de vino tinto pero siempre dentro de las comidas principales.
- No hay relación directa entre el tabaco y la diabetes, pero el fumador que tiene esta patología presenta más posibilidades de padecer una enfermedad cardiovascular.
- Aunque la fruta es un alimento muy sano y recomendable para los diabéticos por su aporte de fibra, debe evitarse su consumo si es en almíbar o confitada.
Una vida descontrolada conlleva un descontrol de los niveles de glucosa. No dejes de ir a las fiestas que se te presentan pero no te olvides de planificar tus comidas, las horas de sueño, los momentos en los que vas a realizar ejercicio y la toma de los medicamentos.
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